El Instituto Nacional de Estadística y Geografía confirmó el tamaño de la crisis turística y su impacto en el PIB de Quintana Roo.
Los números revisados del Producto Interno Bruto para las entidades federativas correspondiente a 2023 reflejan y confirman un desplome de 14 mil 601 millones de pesos en el principal rubro del turismo.
Se trata de los hoteles, restaurantes, servicios culturales y de demás servicios de recreación.
Según los datos oficiales del INEGI Informa, el PIB de los Servicios de esparcimiento culturales y recreativos así como los Servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas fue de 66 mil 779 millones de pesos en el último año medido, es decir, 2023.
La cifra representa una variación negativa del 17.9 por ciento respecto a 2022, cuando el PIB de esos sectores alcanzó los 81 mil 380 millones de pesos.
El PIB de Quintana Roo parece no mejorar
La cantidad de turistas que llegan a Quintana Roo sigue a la baja.
En el primer cuatrimestre de este 2025, por ejemplo, la baja de turismo hacia el Caribe Mexicano fue de 275 mil 082 turistas; un 3.8% menos respecto al mismo periodo de 2024.
Ya desde finales del año pasado, el gobierno de Quintana Roo temía una desaceleración y este año insiste en un escenario complicado.
“Dado a que no es posible en términos de disposición de recursos públicos mantener los niveles de inversión pública en 2024 y 2025, requiere especial atención la evolución de las actividades turísticas, debido a que es el sector con mayor peso relativo en el PlB del estado y una lenta dinámica en las actividades turísticas tendrá un fuerte impacto en el PIB del estado de continuar la tendencia negativa para 2025”, consignó el gobierno en su Proyección de la tasa de crecimiento del PIB de Quintana Roo para 2024-2025.
El documento fue elaborado por la Subsecretaría de Análisis Económico y Finanzas Públicas de la Sefiplan Q. Roo, en febrero de este año.
El Producto Interno Bruto total del estado de Quintana Roo cerró el 2023 en 406 mil 186 millones de pesos.
Sin embargo, fue gracias al comportamiento de la construcción que, tras la conclusión de obras como el Tren Maya, ya bajaron a sus niveles habituales.